Unos 60 jóvenes de la República de Panamá, de ambos sexos, entre las edades de 18 y 35 años, procedentes de distintos puntos del país, incluyendo las comarcas indígenas, fueron los protagonistas del histórico debate presidencial que se celebró el 13 de marzo de 2024 en el Complejo Deportivo La Basita de la ciudad de David, provincia de Chiriquí. Este evento sin precedentes en Panamá y Centroamérica marcó un hito en la participación de la juventud en el proceso electoral.
Se trató del primer debate presidencial con formato town hall o de público participativo, en el que los jóvenes seleccionados de manera aleatoria tuvieron la oportunidad de formular preguntas directas a los candidatos presidenciales que buscan ganar la elección del próximo 5 de mayo de 2024.
El debate, organizado por el Tribunal Electoral de Panamá en conjunto con la Asociación Panameña de Debate (ASPADE) y el canal estatal SERTV, se desarrolló en dos bloques con dos segmentos cada uno. Se abordaron cuatro temas o ejes seleccionados de acuerdo con la percepción de la juventud sobre los problemas que más afectan al país: corrupción, descentralización, economía juvenil y preparación competitiva.
Un grupo de cuatro jóvenes realizó una pregunta principal por cada tema, mientras que otros formularon preguntas de seguimiento luego de las respuestas de los candidatos.
Metodología del debate marca un antes y un después
El debate presidencial del 13 de marzo de 2024 en Panamá marcó un hito en la historia del país por su innovadora metodología, que permitió la participación activa de 60 jóvenes en la formulación de preguntas a los candidatos.
La metodología del debate se inspiró en el debate town hall organizado por el Instituto Nacional Electoral de México (INE) en 2018.
La Asociación Panameña de Debate (ASPADE), en colaboración con el Tribunal Electoral, adaptó la metodología a la realidad panameña. Se tomó como base la experiencia de ASPADE en la organización de debates con preguntas de la audiencia y refutación entre candidatos, con el objetivo de maximizar las oportunidades de debate entre ellos.
Selección de jóvenes
Una empresa con experiencia en investigación de mercado seleccionó a los 60 jóvenes participantes mediante un método riguroso; tomando en consideración igual cantidad de hombres y mujeres.
Criterios de selección
Se establecieron seis criterios para la selección:
- No estar inscrito en partidos políticos ni haber apoyado a ningún candidato.
- No tener vínculos familiares con políticos o candidatos.
- No trabajar en entidades públicas o estatales.
- Tener la intención de votar en las elecciones de 2024 sin haber decidido aún por quién.
- Demostrar capacidad verbal e intelectual para formular preguntas.
- Haber votado en las elecciones de 2019 (para mayores de 24 años).
Taller para la elaboración de preguntas
Los 60 jóvenes seleccionados y los moderadores participaron en un taller para redactar tres preguntas sobre los temas del debate.
Luego se seleccionaron las preguntas y a los jóvenes que las formularían durante el debate.
Asistencia técnica internacional
El Tribunal Electoral y sus socios estratégicos recibieron asistencia técnica durante meses, de instituciones como el Instituto Demócrata Nacional (NDI), la Comisión Presidencial de Debates de Estados Unidos e IDEA Internacional de Suecia.
IDEA Internacional gestionó la asesoría del experto en comunicaciones que organizó los debates del INE en 2018.
La innovadora metodología del debate del 13 de marzo de 2024 marcó un antes y un después en la historia de los debates presidenciales en Panamá. La participación de los jóvenes permitió un debate más dinámico, relevante e inclusivo, que sin duda contribuirá a fortalecer la democracia panameña.
Metodología del debate marca un antes y un después
Para la metodología de este debate se tomó como referencia el debate organizado con este mismo formato de town hall, por el Instituto Nacional Electoral de México (INE); que se efectuó en 2018, en Tijuana.
La Asociación Panameña de Debate, una asociación fundada y liderada por jóvenes, con el apoyo del Tribunal Electoral, elaboró y realizó las adecuaciones pertinentes a la metodología del debate presidencial de Panamá, tomando como base sus experiencias en la organización de debates con el formato de preguntas de la audiencia como la refutación entre los candidatos, para lograr más oportunidades de debate entre éstos.
Proceso de selección de jóvenes que formularon las preguntas en el debate
Una empresa con trayectoria en investigación de mercado en Panamá y otros países de Latinoamérica tuvo la tarea de seleccionar, mediante un método riguroso, a los 60 jóvenes que fueron protagonistas de este debate presidencial.
Fueron seis los criterios que prevalecieron para seleccionar a estos jóvenes:
- No estar inscritos en partidos políticos ni haber respaldado a ningún candidato de libre postulación.
- Que no tuvieran vínculos familiares con militantes de partidos políticos o candidatos presidenciales por libre postulación.
- No estar laborando en entidades públicas o estatales.
- Que estuvieran decididos a votar en la Elección General del 5 de mayo de 2024, pero sin aún saber por qué candidato votar.
- Con capacidad verbal e intelectual probada para hacer las preguntas en el debate.
- Los mayores 24 años, haber votado en las elecciones generales de mayo de 2019.
Taller para la elaboración de las preguntas del debate
Los 60 jóvenes seleccionados previamente, participaron en un taller, junto con los moderadores, en el cual cada uno tuvo que redactar tres preguntas sobre los temas planteados. Posteriormente, se seleccionaron a los jóvenes con sus respectivas preguntas, para que las formularan a los candidatos durante el desarrollo del debate.
Asistencia Técnica
Tanto el Tribunal Electoral, como sus socios estratégicos, por varios meses, recibieron asistencia técnica de instituciones internacionales expertas en la promoción y organización de debates electorales como el Instituto Demócrata Nacional (NDI), así como de la Comisión Presidencial de Debates de Estados Unidos y de IDEA Internacional de Suecia, esta última gestionó asesoría del experto en comunicaciones que le organizó al INE los tres debates organizados en 2018.